Salvador Frías fue sin duda uno de los hombres clave de la Segunda República en Alcalá la Real. Su actuación como alcalde en el primer bienio supuso una ruptura con la vieja tradición oligárquica local en la que las familias conservadoras y liberales del pueblo habían emprendido políticas desde arriba y normalmente encaminadas a defender la posición de privilegio de las clases sociales a las que pertenecían.
Frías representó, junto a otros socialistas como José Vela o Dionisio Carrillo, la puesta en práctica de políticas rupturistas que favorecieran a la clase trabajadora. Ese atrevimiento no fue perdonado por las familias liberales y conservadoras de Alcalá que en los años 30 se fascistizaron y apoyaron la solución violenta y autoritaria que les devolviera el poder perdido.
-Salvador Frías fue condenado a muerte en Jaén a tras la guerra. . Su cuerpo ni siquiera fue devuelto a sus familiares.
-José Vela no pudo rehacer su vida en Alcalá, pues el yihadismo Nacional-católico local y su política de apartheid le hubiesen hecho la vida imposible.
-Dionisio Carrillo, tras un tiempo en la cárcel, rehizo su vida en Villa del Río, donde años después se quitó la vida harto de soportar tanta injusticia.
Así se las gastó la España inmovilista y reaccionaria contra todos aquellos sectores que quisieron romper las cadenas de la servidumbre que les oprimían con jornadas de sol a sol, sueldos de vergüenza y un trato similar al sufrido por los esclavos.